Prácticas De Integración Para Disminuir El Abandono Estudiantil En La Educación Superior
Abstract
El abandono escolar en la educación superior se ha convertido en un tema de alcance mundial. Con más frecuencia los países comparten en foros internacionales preocupaciones y acciones para enfrentar los retos institucionales que permitan atender y retener a una población estudiantil diversa en su preparación y en sus características socio-demográficas. Aun cuando hay más conocimiento sobre las causas y la naturaleza de la deserción escolar y mayor conciencia de sus consecuencias negativas (Kuh, Kinzie, Schuh,& Whitt,2005; Braxton, Hirschy, McClendon, 2004, de Vries, León, Romero & Hernández, 2011; Vera, Ramos, Sotelo, Echeverría & Serrano, 2012), sigue existiendo una brecha entre la teoría y las formas para realizar intervenciones integrales a fin de prevenir de manera eficiente y duradera el abandono (Seidman, 2012). En la literatura proliferan ejemplos de acciones de cómo atender el problema del abandono, sin embargo, muchas de estas prácticas no están respaldadas por evidencias rigurosas de su efectividad, por lo que es difícil medir su éxito. El propósito de este trabajo es presentar una síntesis de las principales prácticas de integración de los nuevos estudiantes, para disminuir el abandono y mejorar la retención escolar en la educación superior. Se realizó una búsqueda sistemática de publicaciones en la literatura internacional, se consultaron materiales en revistas indexadas así como informes de instituciones de educación superior. Se encontró que las prácticas de integración más frecuentes se pueden clasificar en tres grandes grupos: 1) orientación a los nuevos estudiantes (seminarios de primer año y talleres de inducción), 2) asesorías académicas (mentorías, tutorías, instrucción suplementaria, “counseling” o sesiones de consejo educacional) y 3) atención a los alumnos con preparación deficiente (educación remedial o del desarrollo, cursos de nivelación, cursos propedéuticos). Las prácticas más exitosas están fundamentadas en un marco teórico concreto o en investigaciones empíricas, tienen objetivos claros, obedecen a las necesidades de la institución, tienen una descripción detallada y precisa de la intervención, presentan evidencias de su efectividad y se realizan de manera sistemática. En la literatura se recomienda que la evaluación se planeé cuidadosamente, de preferencia, desde la concepción de la práctica y se siga una metodología rigurosa (Institute of Education Sciences, 2003). Se discute cómo en América Latina falta difundir y publicar las acciones que se llevan a cabo para disminuir el abandono, así como empezar a generar evidencias empíricas de la efectividad de estos esfuerzos. Este trabajo será de utilidad como un marco de referencia orientativo para las instituciones participantes en el proyecto ALFA-GUIA.
Collections
- Estudios [165]